Guía para jubilación de EMS World: Riqueza y salud

La normatividad sobre la Seguridad Social varía en cada país, así como las leyes sobre jubilación y retiro de cada gobierno. El siguiente artículo está basado en trámites estadounidenses, no obstante es una buena guía de referencia respecto a los pasos a seguir para la jubilación y la información pertinente para efectuarla, la recomendación es consultar las políticas locales aplicables al respecto, para dicho proceso. (N. del E.).

El primero de la serie.

La jubilación. Nunca pensé que me encontraría aquí. Siempre encontraba razones para seguir trabajando.

Durante años, fue el ego. Ser paramédico era una gran parte de mi autoestima. Sabía que no me sentiría tan bien conmigo mismo si la única licencia en mi bolsillo viniera del departamento de vehículos y transportes.

También el dinero era un factor. A veces, mi esposa y yo ganábamos menos que el salario mínimo de algunos estados, pero incluso un trabajo de paramédico a tiempo parcial en el sureste, constantemente mal pagado, ayudaba a equilibrar nuestro presupuesto. Helen y yo pospusimos compras innecesarias durante décadas mientras que nuestros perros y gatos siempre conseguían lo que querían.

Luego, el verano pasado, después de 30 años en el SEM, comencé a considerarme jubilado. Fue más un tecnicismo que una decisión fundamental: estaba a mitad de camino de los 69 a los 70 años, y no había visto a un paciente desde que, como se dice en el béisbol, "detener el robo" activaba solo a los lanzadores y receptores. Las lesiones y los obstáculos relacionados con la edad me impidieron buscar un último puesto en la central de emergencias del 9-1-1 en alguna próspera comunidad costera hambrienta de paramédicos. Era hora de aceptar mi estado sedentario y llamarlo carrera.

Hubiera estado mejor preparado para abandonar el SEM, si hubiera aprendido más sobre  orientación ocupacional en la jubilación cuando era joven pero, como muchos de mis colegas, me sentía invencible. ¿Quién piensa en la jubilación cuando el tiempo y las oportunidades parecen ilimitados?

¿Qué hay de ti? ¿Alguna vez te has preguntado cómo financiarás tus años en el retiro? ¿Tienes en mente los ajustes en el estilo de vida, o simplemente vas a improvisar mientras ves a otras personas ir a trabajar? No es necesario tener mi edad para preocuparse por mantenerse saludable y solvente después del SEM.

Tal vez pueda ayudarte a empezar. Pero antes, un aviso: los programas y regulaciones gubernamentales que vamos a discutir, tienen muchas variables, la mayoría de las cuales no caben en este limitado espacio. Mi genérico consejo no sustituye la asesoría personalizada de un experto.

La Seguridad Social

Unos años después de que me inscribí, en línea, en una cuenta de Seguridad Social, recibí una carta de la oficina local que confirmaba el acuse de mi solicitud electrónica de beneficios de jubilación. ¿El problema? No había solicitado ningún beneficio. Alguien se estaba haciendo pasar por mí, por lo tanto no los tenía.

Te ahorraré los detalles sobre la solución a mi identidad robada; es un tema para otro momento. Lo menciono para advertirte que las herramientas de jubilación basadas en la web, como cualquier otra cosa en Internet, pueden ser piratas. Siempre que sea posible, utiliza conexiones seguras y protege tu información confidencial con autenticación multifactorial en lugar de una sola contraseña. Luego, adquiere el hábito de vigilar tus cuentas en búsqueda de actividad sospechosa.

El mayor problema para mí, fue mi enfoque pasivo ante la jubilación. Pensé que los beneficios de la Seguridad Social eran bastante automáticos y no requerían más preocupación que, digamos, la escasez del jarabe de ipecacuana. Me equivoqué. Tú también podrías estarlo, si ya estás en los 40, persiguiendo idílicos "años dorados". Cualquier tiempo de ocio que hayas ganado, no durará si no puedes permitírtelo.

Comience con estas preguntas:

¿Cuándo debo solicitar la Seguridad Social?

La mayoría de ustedes tiene derecho a los beneficios de jubilación en cualquier momento después de cumplir 62 años de edad. Exactamente cuándo comenzar ese aporte mensual es una de las decisiones más importantes que tomarás, porque la cantidad aumenta aproximadamente un 8% por cada año que esperas, hasta los 70 años. Esto es muy importante, déjame ponerlo de otra manera: cuanto antes recibas los beneficios, menos obtendrás por año, para siempre. Eso va en contra de la práctica común de aprovechar los fondos de la Seguridad Social lo antes posible. Si puedes darte el lujo de postergarlo, debes hacerlo. Hay mucho en juego, como verás en este ejemplo del libro "Get What's Yours" (Obten lo que es tuyo) de los autores Kotlikoff, Moeller y Solman, que mi fuente de referencia para obtener consejos sobre la jubilación:

Digamos que (como yo) naciste entre 1943 y 1954. Esto haría que los 66 años sean tu plena edad de jubilación (la llamaremos PEJ), un punto de referencia del gobierno basado en los cumpleaños que ayuda a determinar cuánto te deben y cuándo puedes tomarlo. (La PEJ para los nacidos un año después de 1955, sería de 66 años y dos meses).

Si tu beneficio mensual en la PEJ fuera de $1,000; recibiría solo $750 (25% menos) a los 62 años, la edad mínima. Pero por cada año que esperes, más allá de la PEJ, tus pagos aumentarían en un 8%. Trata de encontrar una inversión segura con ese tipo de rendimiento. A los 70, alcanzarías un máximo de $1,320 por mes. Eso es un 76% más de lo que obtendrías a los 62 años.

Probablemente estés pensando: "pero Mike, sí comencé con $750 al mes cuando cumplí 62, para cuando tenga 70, estaría adelante por... veamos... $72,000". Esto es cierto, pero alcanzarías el punto de equilibrio a los 79 años, si esperaras para cobrar (sin incluir los intereses). Cada año que vivieras más allá de eso, ganarías $6,840 (12 meses de $570 cada uno). Eso compra mucha carne seca.

Tal vez eres pesimista respecto al tiempo que vivirás. Muchos de tus compañeros de trabajo de tu misma antigüedad, sienten lo mismo. Tomar más dinero ahora y menos después puede sonar como un buen intercambio, pero ¿qué pasa si, extrañamente, te mantienes saludable y sobrevives a tus ahorros? Parafraseando a Scarlett O'Hara, ¿a dónde irías?, ¿a un asilo de ancianos del condado? La mayoría de nosotros, en el SEM, sabemos que son lugares horribles. Prefiero maximizar mis beneficios a largo plazo para no terminar almacenado con otros octogenarios dentro de 10 años.

Piensa en la Seguridad Social como un seguro de vejez: cuanto más tengas, más tiempo podrá ayudarte a vivir con dignidad.

¿Cómo puedo solicitarlo?

A pesar de mi desagradable experiencia con el robo de identidad, sigo creyendo que la forma más fácil y segura de solicitar la Seguridad Social es en línea. El proceso controlado por computadora se siente como un apoyo y no es demasiado aterrador. No debería tomar más de 30 minutos; además, no tendrás que preocuparte de que algún intermediario humano te engañe o te malinterprete.

Comienza abriendo una cuenta gratuita en línea, la cual debes monitorear mensualmente, incluso después de comenzar a cobrar los beneficios. En Estados Unidos, la Administración de la Seguridad Social acaba de terminar de actualizar la calidad y la cantidad de información que verás.

En mi opinión, presentar la solicitud en persona en su oficina local de Seguridad Social, es la segunda mejor opción. Tratarás con un agente que quizás no sepa mucho más que tú sobre tus beneficios de jubilación, pero al menos puede participar en el proceso revisando los resultados y haciendo ajustes.

Si presentas tu solicitud por teléfono, la tercera mejor opción, tendrás que navegar por un intrincado menú audible y podrías esperar hasta una hora antes de poder hablar con alguien, que no necesariamente se graduó entre los primeros de su clase de orientación sobre Seguridad Social. Recibí malos consejos de varios representantes de servicio al cliente que eran buenas personas, pero con pocos recursos.

Independientemente de cómo presentes la solicitud, para los Estados Unidos, consulta el sitio web ssa.gov para ver los documentos que necesitarás. Comunícate con la oficina local si no puedes encontrar respuesta a tus preguntas en línea. Toma notas, no confíes en nadie y haz un seguimiento.

¿Cuánto dinero recibiré?

Mencioné que los beneficios crecen si los esperas. Inicialmente, dependen del monto y el tiempo que hayas contribuido a la Seguridad Social, durante todos esos años de deducciones de nómina que minan el salario. Puedes leer las fórmulas en "Get What's Yours", pero es probable que encuentres ese tedioso ejercicio incompatible con una vida saludable. Un mejor uso del tiempo sería descargar tu estado de ganancias a través de tu cuenta en línea y asegurarse de que sea correcto.

Si tu esposo o esposa ha ganado mucho más que tú, incluso si ya no están casados, considera solicitar beneficios conyugales. Si calificas, recibirás hasta la mitad de su monto de la PEJ, suponiendo que ya hayan solicitado la Seguridad Social.

Los beneficios conyugales reemplazan los tuyos... bueno, más o menos. Ganarás lo que es tuyo más una cantidad adicional, cuya suma alcanza un máximo de la mitad del derecho a la PEJ del cónyuge. Así que no, no obtendrás ambos, en realidad no. Elige el que esté más alto. Luego ve a trabajar en algo más relajante, como tu declaración de impuestos.

¿Cuándo y cómo recibiré lo que me deben?

Los beneficios de jubilación se transfieren digitalmente cada mes a una cuenta que elijas, en un día miércoles, designado en función de tu cumpleaños. (Los cheques en papel ya no son una opción). Una peculiaridad del sistema, es que siempre se paga el beneficio del mes anterior; por ejemplo, el depósito directo de abril es lo que se le debe de marzo. Sospecho que el Tío Sam gana mucho dinero con esa peculiaridad, pero concentrémonos en algo abrumadoramente positivo: después de décadas de deducciones de nómina por impuestos, seguros y otras tarifas, te encantará despertar con tu propio miércoles especial una vez al mes con un saldo bancario mayor que el que tenías el día anterior. Y no tendrás que responder a ninguna hemorragia gástrica para ganarlo. Helen lo llama "el dinero mágico".

¿Mis beneficios están sujetos a impuestos?

En general, esto depende de lo que ganes. Los ingresos provisionales, calculados mientras prepara su declaración, determinan cuánto está exento de impuestos federales en la Seguridad Social. Muchos de ustedes podrán proteger al menos el 50% de sus beneficios.

¿Qué puede salir mal?

Infinidad de cosas. Podrías presentar tu solicitud demasiado pronto o demasiado tarde y perder algunos beneficios. Podrías solicitar o recibir los beneficios incorrectos. Podrías perderte una carta o una llamada telefónica crucial de la oficina de Seguridad Social sobre tu solicitud, no responder y luego cancelar tu solicitud (como me pasó a mí). Podrías recibir consejos inexactos en la oficina de Seguridad Social. Podrías pasar por alto la parte sujeta a impuestos y terminar con una gran factura del fisco. Podrías ser la desafortunada víctima de un fraude, o incluso, de un malentendido que te costará tiempo y dinero.

El antídoto para todo lo anterior es la preparación, la documentación y el seguimiento.

La próxima entrega de esta serie cubrirá el programa Medicare.

El paramédico jubilado Mike Rubin es el autor de Life Support, una colección de ensayos orientados al SEM, y miembro de la Junta Asesora Editorial de EMS World. En mgr22@prodigy.net puedes contactarlo.

Traductor

Omar Rojas Tapia

Omar es fundador y director de REEDS, es instructor de los programas AHA, NAEMT, ECSI. Es director médico del H. Cuerpo de Bomberos de Acámbaro, director médico Rescate 1 de Querétaro I.A.P. y ponente internacional en congresos de medicina prehospitalaria.

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